Salones con papel pintado
Las paredes son unos de los primeros elementos que consideramos en la decoración o la remodelación de un salón. Así que es usual que nos enfrentemos a las preguntas: ¿Cómo le damos un nuevo aspecto? ¿De qué manera disimulamos sus imperfecciones? Pues el papel pintado se encuentra entre las opciones que debemos considerar, ya que ha alcanzado un auge importante en los últimos años, no solo como tendencia retro, sino con nuevos formatos que encajan a la perfección con cualquier estilo decorativo.
El papel pintado en la decoración moderna
Sus numerosas ventajas y estética se han impuesto al paso del tiempo, por lo que se ha recuperado este útil recurso decorativo del olvido en el que permaneció durante años. Hoy tiene cabida en cualquier tipo de habitación y ambientación, ya que resulta muy fácil encontrar uno acorde a las exigencias que se plantean, entre la amplia variedad de catálogos que se comercializan. Incluso si se desea crear un diseño propio a partir de una imagen o una fotografía, es posible imprimir los llamados fotomurales que siempre tienen un sello personal.
Tipos de papeles pintados modernos
Además de los papeles pintados tradicionales que consisten en una simple lámina de papel, para los que vale comentar que las técnicas modernas han mejorado mucho la calidad de las impresiones, también es posible encontrar los papeles pintados a relieve. Estos diseños más contemporáneos aportan una textura a la superficie donde se colocan (imitación a estuco, piedra, aterciopelados, etc). Estos contrastes entre colores y texturas permiten hacer unas composiciones creativas que con la pintura solamente serían casi imposibles de lograr.
Características a considerar del papel pintado
Antes de elegir el papel pintado para el salón siempre es recomendable tener en cuenta las características que este posee y que se reflejan de manera común en sus etiquetas. Vale la pena considerar que el papel sea resistente a la humedad y a los rayos solares en dependencia de la pared que se quiera empapelar, además de si ofrece la posibilidad de recolocarlo para poder corregir cualquier error en los primeros minutos de fijación.
Ventajas de un salón con papel pintado
Como otras de las ventajas que hacen tan atractivo al papel pintado debemos mencionar su economicidad, ya que con poco dinero se puede transformar un salón completamente. Unido a eso se encuentra que la técnica de empapelar salones es bastante fácil, lo suficiente para que cualquier persona lo pueda hacer por su cuenta.
Como resulta económico y ponerlo y quitarlo se hace muy sencillo, muchas personas optan por luego de un tiempo, si se aburren, reemplazarlo por uno nuevo. Pero si se desea un diseño que dure por años y se le pueda dar mantenimiento, entonces se deberá optar por uno de tipo lavable, que con un poco de esponja, agua y jabón queda como nuevo.
El papel pintado también se usa en un sentido práctico cuando se desea tapar completamente las imperfecciones de una pared. Esto resulta mucho más difícil con la pintura ya que requiere un tratamiento previo a la pared, lo que conlleva también una mayor inversión.
Cómo acertar en la colocación del papel pintado
A pesar de que una elección acertada de papel pintado hará ganar en estilo y sofisticación al salón, hay que tener cuidado de no obtener el efecto contrario. Es por eso que se deben elegir con cuidado el tipo de diseño y las paredes a revestir, para no abusar y que el salón no luzca demasiado recargado. De manera general no se recomienda revestir más de una o dos paredes dentro de una misma habitación. También hay que reducir el número de cuadros o vinilos decorativos que se utilicen, ya que no se crea un buen contraste entre estos elementos.
Esperamos haberte convencido de las ventajas de colocar papel pintado en el salón. Ahora solo queda que sigas investigado en los catálogos de las firmas reconocidas en este renglón, hasta que encuentres los diseños que mejor se adapten a tu decoración.
